Me he encontrado con todo tipo de gente innovadora, desde empresarios que dicen mejorar negocios desarrollándolos y explotándolos literalmente hasta niños innovadores que sin estudiar logran plantear ideas increíbles y que a uno o más adultos han dejado sin palabras; pero ¿es eso innovación?
Aquí mi punto de vista con un poco, solo un poco, de conocimiento aplicado.
Innovación lo defino no solamente como buenas ideas o planes que generan propuestas novedosas sino que éstas deben estar materializadas y aplicadas con resultados tangibles y de alta calidad. La innovación es una acción modificadora transversal, es decir que cambia muchos procesos al mismo tiempo permitiéndonos pensar y repensar objetos o actividades a través de disciplinas que parecerían incompatibles, por ejemplo, encontrar el cómo mejorar un parque a través de la electrónica o el cómo desarrollar un zapato a través de la sociología. ¿suena familiar?
No puede existir innovación sin conocimiento… para llegar a un smart watch debimos pasar obligatoriamente por el reloj de arena. Y no es la arena sino lo que esta nos enseñó.
La innovación planteada de esta manera empieza a alejarse de ese primer párrafo que describe más a un ser creativo con cierto talento para “ver el futuro” y a acercarse más a un pensamiento científico por varias razones y aquí las que para mi son indispensables entender:
Técnicamente hablando, no teóricamente, es una acción que siempre necesita estar planificada, no se da por arte de magia y definitivamente no se da sin conocimiento, además, es muy necesario definir su enfoque de acción para que pueda operar sobre -y esto si dice la teoría-:
- la Estructura o Núcleo del …